No , no te has equivocado de página y no, no es que hayamos decidido cambiar la temática habitual de nuestro blog por los fogones de la cocina. Simplemente que en nuestro empeño y afán por mostrar los secretos y belleza de nuestra tierra, no nos podíamos olvidar de un pilar fundamental como es la riqueza gastronomía gallega. Por eso de vez en cuando os traeremos alguna receta típica de Galicia. Como la de hoy, un básico en nuestra cocina, pulpo á feira.
Su nombre se debe a que era el que preparaban las pulpeiras en las "feiras" ferias. Os animo a tod@s con esta receta puesto que es relativamente fácil, la complejidad radica en que el pulpo quede tierno , la solución es comprar el pulpo congelado, o si se compra fresco congelarlo un par de días para romper los nervios del cefalópodo y que quede blando. Antiguamente el pulpo se "mazaba" o sea que se le propinaba una soberana paliza al animalito con el fin de ablandar sus duras carnes, hoy en día esa "técnica" se ha sustituido por la congelación. En esto de cocinar el pulpo cada maestrillo tiene su librillo y circulan por hay todo tipo de trucos y leyendas urbanas. Hoy voy a contar como lo preparo yo, y como se cocinaba en mi casa desde siempre. Como ingredientes necesitaremos;
-un pulpo de 2 kg. aprox - una cebolla - aceite de oliva virgen extra - pimentón picante - sal gorda
1- Una vez descongelado el pulpo, ponemos a calentar una olla grande con agua y esperamos a que esta empiece a hervir.
2- En ese momento "asustaremos al pulpo" unas tres veces, no se trata de contarle historias de terror o algo parecido, simplemente es meterlo y sacarlo en el agua como mínimo unas tres veces ( yo lo hago nueve) con esta técnica debido al contraste frio-calor se conserva mejor la piel durante la cocción.
3-Echamos la cebolla entera y esperamos, depende el tamaño del pulpo pero como norma general unos 45m. Pasado este tiempo apagamos el fuego, y sin sacar el pulpo del agua dejamos que repose unos 15m.
4- Una vez pasados los 15m. lo retiramos a una fuente ( mejor un plato de madera) y lo cortamos en trocitos de mas o menos medio centímetro con unas tijeras. Le añadimos sal gorda, un chorrito de aceite y pimentón al gusto.
Y listo ya tenemos nuestro delicioso pulpo preparado para comer.
Creo que está recogido en el código penal como delito, y sino debería estarlo el venir a Galicia y no probar el pulpo en cualquiera de sus variedades, mención especial también en este apartado a la rica empanada de pulpo.
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Ummmmmmmmmmm.... Se me hace la boca agua. Y es que me encanta el pulpo a feira. :)
ResponderEliminarEn mi casa también se asusta tres veces, jajaja, pero no lo cocemos con cebolla, si no con un trozito de cobre. No me preguntes el porqué, pero mis padres siempre lo hicieron así. Eso sí, luego de cortarlo, aceite de oliva, sal gorda y pimentón dulce o para los que nos gusta un poquito más fuerte, una pizquita de pimentón picante.
ResponderEliminarSi el truco del cobre ya lo había oído y tiene su lógica, si te fijas las ollas de las pulpeiras son casi todas de cobre. A mi también me gusta un poco picante.Un abrazo guapa ;)
EliminarQué hambre me ha entrado leyendo esto!!! Tiene muy buena pinta y me ha parecido muy bien explicada la receta :) A ver si algún día lo hago jejeje. Un abrazo!
ResponderEliminarQué rico... qué buena pinta...
ResponderEliminarOs animo a que lo intentéis, es relativamente fácil y está muy muy rico.
ResponderEliminarGracias por pasar por aquí, un abrazo.
A estas horas que bien me entraba uno de esos regado con un Albariño. Me conformaré con una ensalada que me ha preparado mi mujer.
ResponderEliminarSaludos desde Nigrán.
Javier
Lo de asustarlo no lo conocía, seguro que por eso en mi casa no queda tan bien, ha que probarlo ;)
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